El CERMI analizará cómo afecta la IA a los derechos de las personas con discapacidad. La inteligencia artificial y su relación con los derechos de las personas de nuestro sector social es el eje temático elegido por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) para conmemorar el próximo 3 de mayo. Así lo recoge en una nota Servimedia, a propósito de la jornada que se celebra en España el Día Nacional de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.

El lema de la jornada será ‘Por una IA ética y respetuosa con los derechos fundamentales de las personas con discapacidad’. En el texto se subraya «la necesidad de una gobernanza amplia y participativa de todas las instancias sociales concernidas para que la IA no suponga una “amenaza” para los derechos, la inclusión y el bienestar de las personas con discapacidad».
El manifiesto de CERMI pone el foco en la necesidad de garantizar que las IA se desarrollen de forma inclusiva, ética y respetuosa con los derechos humanos de las personas con discapacidad. «Aunque estas tecnologías pueden suponer avances significativos, también conllevan riesgos, como la reproducción de estereotipos y la exclusión de personas con discapacidad, debido a la falta de datos representativos y a diseños poco accesibles», señalan.
Tecnología accesible e inclusiva
El manifiesto de CERMI también destaca que la IA, aunque beneficiosa, puede ser perjudicial si no se diseña teniendo en cuenta la diversidad. «Pueden generarse sesgos, exclusión digital y discriminación, especialmente hacia mujeres y niñas con discapacidad», señala.

Entre los principales riesgos señalados están la brecha digital, la falta de representación de personas con discapacidad en los datos que alimentan la IA y la ausencia de transparencia en su funcionamiento. Además, se recuerda que el uso masivo de estas tecnologías también tiene impacto ambiental.
Por todo ello, el CERMI exige que el desarrollo y uso de la IA esté regulado por el Estado, cumpla con los estándares internacionales en materia de derechos humanos y sea revisado por la propia ciudadanía, incluyendo activamente a las personas con discapacidad y sus organizaciones.
Esta iniciativa no solo mejora el acceso a la información, sino que también sirve para entrenar tecnologías más inclusivas y representativas, ayudando a combatir estereotipos desde su base. Con estas acciones, el CERMI reafirma su compromiso con una inteligencia artificial que respete la dignidad, promueva la inclusión y actúe como herramienta de igualdad para todas las personas.