La nueva Ley de Familias tiene un espacio para la discapacidad. Este martes se ha dado luz verde a un proyecto legislativo «que busca reforzar la protección social de todos los modelos familiares», informa EFE. Además, la iniciativa persigue «reconocer nuevos derechos para las familias monoparentales, que se considerarán numerosas con dos hijos, además de contemplar medidas de ayuda a la conciliación».
Desde el ministerio de Derechos Sociales lo califican de «hito» en la política social de España. La norma irá al Congreso y será tramitada por el procedimiento de urgencia. El texto aprobado asimila las familias monoparentales con dos hijos a las numerosas y reconoce la diversidad de modelos familiares. Entre ellas, incluye familias adoptivas, reconstituidas, LGTBI, múltiples o acogedoras.
Además, mira a aquellos núcleos familiares con algún miembro con discapacidad. Así, también pasarán a ser familias numerosas aquellas con dos hijos en las que haya un progenitor con un 33 % de discapacidad, en lugar del 65 % que existía en la actualidad, y se recogerán los supuestos de unidades familiares en las que convivan hijos de uniones anteriores, que también podrán optar a este título.
Con la nueva norma ascenderán a más de un millón las conocidas hasta ahora como “familias numerosas”, ya que incorpora a unos 300.000 hogares de un solo progenitor con dos hijos.
La discapacidad en el anteproyecto
El Real Patronato Sobre Discapacidad ha publicado una infografía que resume la presencia de la discapacidad en la Ley de Familias. En ella, lista las distintas medidas recogidas en el artículo 43 del texto para garantizar el derecho a formar una familia.
Así, se enumeran la igualdad en el acceso a los apoyos, bienes y servicios públicos o las medidas de apoyo para garantizar los mismos derechos con respecto a la vida en familia para niñas y niños. Asimismo, se alude al derecho de todas las personas con discapacidad a fundar una familia y decidir las hijas e hijos que quieren tener.
Por último, se mencionan los derechos y obligaciones con respecto a la custodia y la asistencia apropiada a personas con discapacidad para desempeñar la crianza de menores.
El Real Patronato también recoge diferentes apoyos para familias con integrantes con discapacidad. Entre ellos, incluye las medidas sociales y económicas para paliar la sobrecarga y sobrecoste de la atención, mejoras en prestaciones de la Seguridad Social y consolidación de los sistemas de coordinación para el apoyo a familias.
Por otra parte, se menciona el desarrollo de servicios de atención universalmente accesibles, las necesidades de las personas cuidadoras en el catálogo de referencia de servicios o las medidas de apoyo psicológico a familias con grandes necesidades de apoyo.
Finalmente, se recogen la atención temprana como derecho subjetivo, la libre opción de lenguas de signos a niñas y niños con discapacidad auditiva, la garantía de vivienda digna y la puntuación específica para becas de comedor o libros.