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El nuevo baremo de la discapacidad fue aprobado hace unos días en pleno Consejo de Ministros. Esta valoración determina el grado de discapacidad de las diferentes personas de acuerdo a sus circunstancias personales y físicas.

Tradicionalmente, se seguía una serie de pautas en vigor desde el año 1999. No obstante, el nuevo baremo aprobado por el Gobierno persigue un objetivo más ambicioso. Esto es, adaptarse al modelo social de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas con un enfoque de derechos humanos.

La demanda, iniciada hace más de una década, busca dar respuesta así a las 4,38 millones de personas que conforman la población española con discapacidad. Las novedades más destacadas pasan por tener en cuenta varios elementos. Entre ellos, las funciones y estructuras corporales de la persona. Esto es, si puede o no realizar actividades en un entorno sin barreras.

Además, se valora cuál es su grado de participación social y las barreras ambientales que enfrenta. Es decir, el contexto donde se pone en práctica todo esto será lo que determine el grado de discapacidad de la persona.

El proceso de evaluación, explican, lo solicita la persona interesada, y promete ser más rápido, más ajustado a la realidad y accesible. Otra de sus novedades es la opción de trámite de urgencias cuando las causas de la discapacidad fuesen humanitarias, de salud o para mujeres víctimas de violencia de género.

Así, el nuevo baremo de la discapacidad parte del diálogo territorial y aporta criterios objetivos comunes. Además, busca hacer una descripción más precisa del grado de discapacidad, con una base científica y una atención centrada en la persona.

El impacto del baremo en el certificado de discapacidad

El baremo es el criterio esencial para la expedición de un certificado que acredita la condición legal de persona con discapacidad. Con este reconocimiento, se ejercen los derechos reconocidos a este sector de la sociedad en España y se pueden acceder a distintos beneficios, prestaciones y servicios.

Para solicitar el certificado debe hacerlo la persona interesada, su tutor o representante legal, en el Centro Base de su comunidad autónoma. Aparte del certificado, se puede solicitar la tarjeta de discapacidad, con un formato más cómodo y que se puede llevar en cualquier cartera o tarjetero. Además, se puede solicitar más información en el teléfono 012.

El certificado del grado de discapacidad tiene validez en todo el territorio nacional y se resuelve en un plazo máximo de 6 meses. Es revisable, y la actualización del nuevo baremo de discapacidad permite su trámite de urgencia.

Entre los beneficios que presenta, se encuentran deducciones de impuestos como el IVA, el IRPF o el de Sucesiones. Además, facilita el acceso a ayudas y descuentos en transporte, productos de apoyo o adaptaciones del hogar, entre otras necesidades. Por otra parte, existe un porcentaje de reserva en empleo público para personas con discapacidad (del 7%), en plazas de centros educativos y en ayudas sanitarias de mejora de calidad de vida.

También hay apoyos en la asistencia jurídica, en procedimientos relacionados con la salud y la discapacidad. En torno a esto ASPAYM celebra este jueves 27 a las 16 horas una charla abierta ‘Reconduce tu vida’, en colaboración con DGT, para resolver dudas sobre estos temas, con la abogada Patricia March.

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