Una buena irrigación transanal es fundamental para una mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad. En ese sentido, merece la pena recoger claves de la próxima charla online que celebra ASPAYM Catalunya. Luis Ángel Peñuelas aportará claves sobre esta técnica el próximo jueves 2 de junio a las 18 horas en el Instagram de la entidad.
Peñuelas es actualmente manager de venta interna en Coloplast. Sin embargo, el grueso de su carrera se ha desarrollado en la medicina, desde la Fundación del Lesionado Medular. También ha conocido diversas áreas de distintos hospitales madrileños. Además, ha establecido vínculos con centros como el Hospital Nacional de Parapléjicos o el institut Guttmann, entre otros.
ASPAYM Catalunya ya ha aportado previamente la visión médica de la irrigación transanal, con el doctor Miguel Ángel González Viejo. En esta ocasión, Peñuelas aborda la parte más vinculada a enfermería con Peristeen: «Es un producto que lleva más de 17 años en España», expone. «Se encuentra además avalado por evidencia científica que respalda su uso». A pesar de estar prescrito por un médico, es fundamental el seguimiento de la enfermería: «Hay que enseñar al paciente; formarle, acompañarle, resolver dudas, es un tratamiento muy personalizado», desgrana.
Como explica Peñuelas, cada paciente tiene sus propias particularidades. Dichas circunstancias exponen las necesidades de ajustar cada estrategia de irrigación: «La enfermería se adapta y se integra en su vida diaria», señala. No hay que caer en el error de imponer horas ni ser rígido: «Hay que insertarse en el horario personal de cada paciente, en sus actividades, su vida sociolaboral…».
Irrigación según lesión
De un modo genérico, Peñuelas identifica que el patrón intestinal se relaciona con el tipo de lesión. Así, aquel suele ser más lento en lesiones altas (tetraplejias) y más rápido en bajas (paraplejias). «La mejor estrategia es establecer un patrón según sus horarios, teniendo en cuenta sus actividades y su ocio». En ese sentido, admite que es más difícil encajarlo en pacientes más jóvenes o en población adolescente: «Tienen más actividades extracurriculares», aduce.
Entre los errores más comunes, destaca cuando el paciente no esté convencido al principio de la terapia: «Pasar por tratamientos previos y probar laxantes puede frustrarle y creer que no va a encontrar solución». La importancia de la actitud se alinea con el primer mes y medio de adaptación crítica a la terapia: «Hay que hacer un esfuerzo extra: cambiar rutinas, aprender, ajustarse individualmente…».
Sin embargo, con creer que la solución facilitará su día a día y aumentará su calidad de vida, no basta. «Si el seguimiento posterior tras ese mes y medio inicial no responde a las dudas que surgen, la terapia va a fracasar». Salvados esos escollos, Peñuelas destaca la confianza que irradia una solución como Peristeen: «Cuenta con guías de uso y un consenso avalado por sociedades científicas», destaca.
Además, apunta que es muy simple de utilizar. «Tiene una pera adaptada a personas con poca destreza manual», señala. Por último, destaca un indicador de temperatura «para evitar quemaduras de quien no tenga sensibilidad».
La charla de ASPAYM Catalunya tendrá lugar el próximo jueves, 2 de junio, a las 18 horas. En ella intervendrá el presidente de ASPAYM Catalunya y director general de ASPAYM, Antonio Reyes.
